El miércoles 29 de Junio nos visitaron
La Maestra Integradora Maru Velazquez
Psicopedagoga Adriana Kala
Con ellas compartimos un enriquecedora charla sobre
PRIMEROS PASOS EN LA ESCOLARIDAD DE NUESTROS HIJOS
¿Qué es la integración escolar?
Se habla de integración escolar de niños con necesidades educativas escolares en relación con la incorporación de estos alumnos a la escuela común.
La base de la integración es el paradigma que indica que es más productivo aprender en un grupo heterogéneo que en uno homogéneo porque de esta manera todos aprendemos con todos, todos aprendemos desde lo diverso.
En la escuela común es necesario que se respeten las necesidades individuales de los niños, los tiempos de cada uno aunque ellos no tengan necesidades educativas especiales. En el caso que se presente este tipo de necesidades, es importante incluir la presencia de un maestro/a integrador/a.
¿Cuándo es aconsejable la integración escolar?
No sólo cuando la familia esté preparada sino también cuando lo esté el grupo receptor (escuela, docentes y otros niños, con esto nos referimos a analizar la cantidad de niños que hay en la sala, no al grupo de niños en sí mismo) y para que esto sea posible es necesario tener en cuenta algunos principios:
- El progreso general que hace cada niño/a se produce porque se planifican adecuadamente las actividades y los materiales de estimulación para no caer en una sobrestimulación.
- El progreso general que hace cada niño/a se produce porque hay buena comunicación e interacción entre la escuela, la familia y el equipo de trabajo.
¿Dónde es aconsejable realizar la integración escolar? Es decir si elegimos el circuito común o el especial.
Los chicos con síndrome de down son ante todo chicos que tienen las mismas necesidades que cualquier otro niño/a y por lo tanto pueden incorporarse a la escuela común, a grupos de juego y aprendizaje desde temprana edad y ya más de adultos a distintos proyectos socio-comunitarios y culturales.
No obstante lo que a veces sucede es que las necesidades que tienen los niños, no sólo afectan a ese niño sino también a sus familias, padres y hermanos que también requieren contención y sostén y el circuito especial está preparado para sostenerlos y contenerlos.
¿Desde qué momento en la vida de un sujeto es posible la integración?
Nosotras entendemos por nuestra formación y experiencia que la concurrencia a la escuela común beneficia el aprendizaje y el desarrollo desde los primeros meses de vida.
¿Quién es y cómo elijo al maestro integrador?
Es un adulto especializado como psicopedagogo, docente o acompañante terapéutico que disponga de los recursos que el maestro común no maneja y que acompañe al niño en el aprendizaje de los contenidos curriculares y de los vínculos.
El maestro integrador debe adaptar los contenidos a los que transmite el maestro de la sala y trabajar conjuntamente con él y con el equipo que trata al niño.
Sugerimos que los integrantes del equipo estén en permanente contacto con la escuela y el maestro integrador para aunar esfuerzos y criterios sobre lo que el niño debe aprender y los objetivos que debe lograr.
¿En qué otras instancias es posible la integración?
Debe realizarse en todas las actividades que desarrolla el niño, a lo largo de toda la vida social tanto dentro como fuera de la escuela, recreos, excursiones, cumpleaños.
Esto no se lograría si la familia, la escuela y los profesionales no se comunicaran entre sí.
¿Cuál es la mejor escuela para mi hijo?
Aquella que lo acepta tal como es. Si bien hay una amplia legislación sobre el tema: - Convención Internacional sobre los Derechos de los Niños, niñas y adolescentes.
- Ley 26.206: Sancionada: Diciembre 14 de 2006. Promulgada: Diciembre 27 de 2006. Capítulo VIII desde artículos 42 a 45. Habla de la Educación Especial que se rige por el principio de inclusión educativa. El Ministerio de Educación garantizará la integración de los/as alumnos/as con discapacidades en todos los niveles y modalidades según las posibilidades de cada persona.
- Diseños curriculares de las Provincias y Capital
No obstante no es lo mismo llevar a un hijo a una escuela que lo acepta porque está obligada a hacerlo a aquella que está comprometida a acompañar al proyecto, al niño y a su familia.
Ssabemos que muchas instituciones comunes no están preparadas para atender las necesidades de ese niño y sus familias. Estas situaciones pueden darse por falta de conocimientos referidos al tema o por barreras de distintos tipos, algunas pedagógicas, otras humanas e incluso hasta arquitectónicas que pueden dificultar la incorporación de los niños al circuito común. Algunas de estas situaciones son fáciles de allanar, otras son más difíciles e incluso en algunos casos decimos que es mejor que no se allanen, es decir, es mejor que no incorporemos a ese niño/a a esa escuela en particular: “no decimos que ese niño no es para esa escuela sino que esa escuela no es para ese niño” y esto sucede para cualquier dificultad aún para problemas de conducta o de aprendizaje. Más aún, a veces sucede que la escuela es para ese niño pero no lo es esa maestra. Cuántas veces pasa que un niño en un determinado momento es “terrible” para una docente y con otra es “bárbaro”.
